Las cajas de ahorro son el primer paso para aprender a manejar tu plata. Tener una cuenta te permite llevar un registro de tus gastos y tus ingresos. Además, tus fondos están respaldados. Podés recibir o enviar transferencias, entre muchas cosas más. Conocé por qué contar con una cuenta bancaria te abre un abanico de posibilidades para tu futuro.

Dicen los libros de historia que el primer banco apareció hace ¡4.000 años! en lo que hoy es Siria e Irak. Ahí, los agricultores y negociantes recibían préstamos mientras trasladaban su producción. Cada uno de ellos tenía algo parecido a una cuenta bancaria. Desde entonces, siguen siendo imprescindibles para administrar las finanzas, las de las familias o en un negocio. Entre todas las opciones, las cajas de ahorro son desde siempre la forma más popular y simple. Seguro escuchaste hablar sobre las cajas de ahorro, pero… ¿sabés qué son y, lo más importante, por qué te conviene tener una? Empecemos por definirlas: una cuenta es un registro que mantiene un banco, en el que guarda tu dinero y cuenta todas las entradas y salidas del dinero a tu nombre, así como los créditos que tengas, las inversiones y otras muchísimas cosas que iremos aprendiendo. Ser titular de una o varias cuentas bancarias permite que vos u otros puedan depositar o transferir dinero a esas cuentas, acreditar tu sueldo, realizar transferencias entre tus cuentas o a terceros, pagar servicios, extraer efectivo de tu saldo o invertir en otros productos del banco. Tener una cuenta bancaria hoy es imprescindible para cobrar, pagar, transferir dinero, pedir un préstamo, y acceder a tarjetas de débito y crédito, con altos niveles de seguridad y trazabilidad. Y, más importante aún, abrir una nunca fue tan simple y fácil.

Una oportunidad, no una rareza

Tener una cuenta no es algo extraño. En la Argentina hay abiertas nada menos que 29.081.298 cajas de ahorro, según cifras del Banco Central de la República Argentina, quien garantiza que tu dinero en ellas esté resguardado y seguro. Pero además hay otro tipo de cuentas: existen 1.060.981 cuentas corrientes -luego te explicaremos qué son y para que se usan-. Además, hay 6.375.436 cajas de ahorro de ayuda social (para beneficiarios de programas de asistencia de la Anses y otros organismos) y otras 6.518.366 cuentas previsionales; es decir, para jubilaciones.

Según cifras del Banco Central de la República Argentina en el país hay abiertas nada menos que 29.081.298 cajas de ahorro.

En total, hay más de 43 millones de cuentas bancarias abiertas, cuatro millones menos que el total de la población relevada por el Indec en el último censo. Es un montón. Y el principal motivo es que no hay excusas para obtener una. Es que abrir una cuenta bancaria en la Argentina es muy fácil: lo podés hacer en la sucursal del banco que elijas, a través de su app o por homebanking. Y además es gratis.

¿Cuáles son los tipos de cuentas bancarias más comunes?

Qué es una Caja de ahorro La Caja de Ahorro es una cuenta de apertura gratuita y sin costo de mantenimiento. Puede ser en pesos o dólares. Allí, podés resguardar tu dinero, tu empleador te paga el sueldo, podés operar en transacciones bancarias y, también, invertir y ahorrar. Entre los múltiples beneficios que tiene la caja de ahorro se destaca, sin dudas, la posibilidad de acceder a una tarjeta de débito asociada a tu cuenta, que te permite realizar transacciones en las sucursales de todo el país, consultar saldos y retirar dinero en cajeros automáticos de la Red Banelco o Red Link; y comprar en comercios adheridos. Los saldos y movimientos de tu cuenta los podés consultar por cajero automático, por homebanking o por la app de tu banco. Además, accedés a los programas de beneficios, en donde por cada compra que realices con la tarjeta de débito, sumás puntos canjeables por premios.

Una cuenta bancaria hoy es imprescindible para cobrar, pagar, transferir dinero, pedir un préstamo, y acceder a tarjetas de débito y crédito.

Qué es una cuenta Corriente En cuanto a su usabilidad, son similares a las Cajas de Ahorro, pero como titular de una cuenta corriente, podés manejar tus depósitos y financiar tus pagos con cheques. Además, tenés un acuerdo de crédito para que si te quedás sin fondos, podés realizar pagos o transferencias usando el descubierto, un crédito que tu banco te concede para evitar situaciones como los impagos de recibos o la falta de saldo. Qué es Cuenta Comitente Una cuenta comitente es un tipo de cuenta bancaria especial pensada para realizar inversiones. Como titular de una cuenta comitente, uno deposita su dinero allí y puede ordenar a su banco o a un agente de inversión que compra y venda ciertos activos, como bonos o acciones. No te preocupes si te parece complejo en esta instancia, pero si a futuro aprendés o querés comprar acciones u otras inversiones la vas a necesitar. Beneficios de la bancarización Tener una cuenta bancaria te ofrece acceso a una enorme cantidad de beneficios. Te invitamos a dedicar un momento a pensarlos:

• Más seguridad: el dinero que tengas está depositado en un banco y este tiene garantía de quién regula a esa entidad, el Banco Central. Esto lo hace mucho más seguro que tenerlo en tu casa, aún si es dentro de una caja fuerte. Además, si te roban las tarjetas, se pueden
• Más comodidad: No necesitás efectivo para comprar lo que quieras. Con tu tarjeta de débito podés comprar o transferir.
• Financiación: Podés solicitar créditos y préstamos personales.
• Historia crediticia: Tener tu propio historial es fundamental para que las instituciones bancarias evalúen si sos candidato para recibir un nuevo crédito.
• Pagar servicios como la luz, el agua o tu servicio de pelis o cable: Con una cuenta podés pagar servicios con débito automático o a través de una tarjeta asociada a la misma. Pagar es más fácil y más simple.